Aparador de cocina

Los diferentes usos del aparador

En la cocina

Este era su lugar de origen, ya que se utilizaba para llevar la vajilla de la cocina al comedor y servirla en la mesa. En los últimos años, sin embargo, se ha convertido en un mueble de almacenaje en toda regla que completa la distribución de nuestra cocina. Puede colocarse contra una pared o al final de una encimera. ¿Su pequeño electrodoméstico (cafetera, hervidor de agua, etc.) le desordena los armarios? Puede colocarlo encima de su nuevo carrito.

En el salón

Algunos aparadores están equipados con un botellero de acero colocado debajo de la bandeja. Su aparador se convierte así en una barra auxiliar. Copas, cubos de champán, cocteleras: sus invitados estarán bien servidos con su aparador de salón. Ahora pueden disfrutar de una copa tranquilamente desde la comodidad de su sofá. En el salón, el aparador se convierte en un auténtico mueble decorativo que combina practicidad y estilo. Una planta, unas revistas, unas bonitas velas... tu aparador dará un toque elegante y refinado a tu interior.

En el despacho

Todos conocemos ese escritorio atestado de papeles y archivos. Discreto e ingenioso, el aparador con ruedas es la solución a la falta de espacio de almacenamiento. ¿Te falta espacio para añadir un verdadero mueble de almacenaje? Utiliza el aparador para guardar tus papeles y carpetas.

En el cuarto de baño

Y sí, el aparador también se puede encontrar en el cuarto de baño. Botellas, productos de belleza y accesorios pueden convertirse rápidamente en un caos, ¡sobre todo cuando se trata de una familia numerosa! Con la estantería, tus productos de belleza estarán por fin ordenados y liberarás espacio alrededor del lavabo.

En el recibidor

En el pasillo, el aparador sustituye a la consola. Elige un modelo de metal negro, más elegante, que te servirá para guardar revistas, jarrones y otros objetos decorativos. Para añadir un toque de verdor: ¿vives en un piso y echas de menos la naturaleza? Crea tu propio mini jardín con un aparador. Plantas y terrarios apilados en los estantes añadirán encanto y verdor a tu hogar.

¿Cómo elegir tu aparador?

- Materiales

Madera, acero inoxidable o plástico, ¿qué aparador elegir?

Aparadores de madera:

además de ser sólidos y duraderos, son ideales para los amantes de la decoración rústica y campestre. La madera sin tratar aportará encanto a su habitación. Los aparadores de plástico: Prácticos, económicos y fáciles de limpiar. El aparador de acero inoxidable: Se integra perfectamente en las decoraciones contemporáneas o un poco más industriales y es ligero. El aparador blanco: El blanco está de moda, es elegante y combina con todo. En decoraciones escandinavas, industriales o contemporáneas, es la garantía de un mueble atemporal. Sólo tiene un inconveniente. Tendrás que limpiarlo regularmente para evitar que el blanco se decolore. Y si prefieres dar un toque de alegría a tu interior, opta por un aparador al ácido para animar tu habitación.

Dimensiones

Hay aparadores de todos los tamaños que se adaptan a las necesidades de cada uno. Antes de elegir tu aparador, coge una cinta métrica y mide el espacio disponible en la cocina. No olvide medir los huecos por los que tendrá que pasar el mueble. La posición del aparador dependerá de cómo esté organizada tu cocina. La mejor forma de saberlo es colocar cinta adhesiva en el suelo, donde estará el aparador. Otra medida importante es la altura, sobre todo si desea utilizar el aparador como superficie de trabajo. En este caso, para no tener que agacharte, opta por un aparador con una encimera de unos 90 cm.

Diferentes equipamientos

El aparador de cocina puede equiparse con distintos accesorios. - Ruedas: las ruedas son muy prácticas si quieres utilizar el carro para desplazar cosas, o simplemente si quieres cambiarlo de sitio. Un pequeño consejo: si tiene el suelo de baldosas, opte por ruedas de plástico, y si tiene el suelo de madera, elija ruedas de goma. - Una superficie de trabajo: indispensable si desea utilizar su aparador en la cocina para preparar sus comidas. - Ganchos: para colgar tus mejores paños de cocina y los utensilios que quieras tener a mano. - Un estante: para guardar las botellas tumbadas y servir a tus invitados con facilidad. - Cestas y estantes: para dividir el espacio de almacenamiento. - Un aparador plegable: el aparador también se puede plegar. Ya no necesitas tu aparador. Basta con plegarlo y guardarlo para que no estorbe en tu salón.